Como seres humanos, ¡necesitamos amor! Somos criaturas sociales que prosperan en la conexión y las relaciones con los demás. De hecho, en el cuento clásico de Winnie the Pooh, Piglet pregunta: “Pooh, ¿cómo se escribe amor?” Winnie the Pooh sabiamente responde: “No deletreas amor, Piglet, lo sientes”. Nunca se podrían decir palabras más verdaderas.
La conexión humana ocurre cuando las personas se sienten vistas y valoradas. La energía positiva se comparte, lo que muy a menudo da como resultado la formación de cierto nivel de confianza y eso mismo es lo que crea un sentimiento de conexión, algo en lo que nosotros, como humanos, confiamos mucho. Fascinantemente, puedes sentirte solo incluso cuando estás rodeado de otras personas simplemente debido a esa falta de conexión. Cuando se produce este vínculo, te sientes comprendido y, lo que es más importante, sientes un sentido de pertenencia, una necesidad primordial que todos los humanos tenemos.
¡Este sentimiento de conexión es muy importante! En 2021, se publicó una colección de investigaciones llamada Informe mundial de la felicidad. El informe encontró que aquellos que se sienten conectados con los demás experimentan una mayor satisfacción con la vida, una mayor resiliencia y una mejor salud mental. Las conexiones y relaciones sólidas ayudan a las personas a enfrentar los desafíos más fácilmente mientras mantienen una perspectiva positiva. ¡También experimentan una mejor salud física, aumentando sus posibilidades de una vida más larga en un 50%!
Pero el ritmo acelerado de la vida y las muchas distracciones a veces pueden hacernos sentir aislados y solos, incluso en una habitación llena de gente. Aquí hay 3 sugerencias simples para aumentar las conexiones en tu vida.
1. Desconecta.
Desconectar de las pantallas, eso es. Cuando estamos atados a nuestro teléfono o mundos de juegos digitales, nuestras conexiones de persona a persona sufren. Aunque enviar mensajes de texto puede parecer que estamos creando una conexión, ciertamente no es lo mismo que la conexión que puede tener lugar en la vida real. Programe tiempo con amigos para jugar o salir juntos. Haz un esfuerzo por saludar a las personas que te rodean.
2. Fomentar las relaciones.
Recordar hechos o detalles sobre la vida de las personas en tu vida puede ser muy útil. Pregúnteles sobre su nuevo trabajo, envíe una tarjeta de cumpleaños, verifique si su hijo ha estado enfermo o simplemente tome su teléfono, o mejor aún, visítelos para ver cómo les está yendo. Cuantos más círculos construyamos a nuestro alrededor, mejor apoyados nos sentiremos mientras ofrecemos ese apoyo y amor a los demás. Es muy necesario en nuestro mundo de hoy.
3. Sonríe.
Parece simple, pero solo este simple acto no solo libera endorfinas felices dentro de nosotros, sino que ciertamente nos hace mucho más accesibles a quienes nos rodean. ¿Sabías que en realidad hay dos formas de sonreír? ¡Es cierto! Tiene que ver con qué músculos faciales están comprometidos. La sonrisa “social” no es tan genuina como la sonrisa de Duchenne, conocida como sonrisa verdadera. El cerebro humano puede distinguir fácilmente entre los dos y nos relacionamos rápidamente con aquellos que exhiben una sonrisa genuina.
Las conexiones humanas son las que nos hacen, ¡bueno, humanos! Cuando elegimos crear conexiones en nuestras vidas, no solo disfrutamos de un mejor bienestar emocional y mental, sino que también se beneficia nuestro bienestar físico. Y puede ser tan simple como compartir una sonrisa con alguien.